La demanda de aves de corral está en auge en el sur de China, hogar de una especialidad local de pollo marinado en sal.
Esto se debe a que los cantoneses buscan con mayor frecuencia alternativas mientras la peste porcina africana arrasa con los cerdos en el país de mayor consumo del mundo. La mayor demanda de aves es una buena noticia para los productores de piensos.
Se espera que el consumo de alimento para aves en China crezca un 20% a medida que la gente consuma más pollo y pato, especialmente en las provincias del sur, según Hou Xueling, analista de Everbright Futures.
Esto más el aumento de la piscicultura debería mantener la demanda de harina de soja, uno de los ingredientes más importantes en la alimentación animal, entre 65 millones y 67 millones de toneladas este año, lo que se compara con las 70 millones de toneladas un año antes, señaló.
A los cantoneses les gusta el pollo, por lo cual hay consenso de que muchas personas reemplazarán el cerdo con carne de ave, añadió Hou luego de un viaje de una semana para analizar la industria en la región sur de Cantón el mes pasado.
La provincia, famosa por su pollo escalfado y su pato asado, es uno de los mayores productores de piensos del país.
La creciente demanda de alimento para aves puede brindar cierto alivio a los agricultores de Brasil, el mayor exportador mundial de soja, que buscan aumentar su presencia en China luego de que el gigante asiático aplicara aranceles del 25% a la oleaginosa estadounidense.
Las compañías en la cadena de suministro de alimentos siguen de cerca la manera en que el virus altamente contagioso, inofensivo para los humanos, pero mortal para los cerdos, cambia las dietas en la nación más poblada del mundo.
El Departamento de Agricultura de EU estimó en abril que la producción de cerdos en China bajará en 134 millones este año, el equivalente a la producción anual total de cerdos estadounidenses y la peor caída desde que comenzó a contabilizar los cerdos del país a mediados de los años 70.
Las importaciones de carne de res ya alcanzaron un récord en abril, mientras que las compras de carne de cerdo de otros países se dispararon un 24% respecto al año anterior.
Los productores de piensos incrementan las ventas a criadores de aves de corral y mantienen los inventarios de harina de soja en un uso de cinco a siete días.