El producto interno bruto (PIB) de Chile creció un 0.5% en el cuarto trimestre, una variación que confirmó la débil expansión de la economía en 2016 tras la contracción de la inversión y deslucidos envíos al exterior.
Con la cifra del trimestre octubre-diciembre, difundida ayer por el Banco Central, el PIB anual chileno acumuló un aumentó del 1.6% tras una revisión al alza del registro del tercer trimestre.
No obstante, destacó que el PIB desestacionalizado del cuarto trimestre se contrajo un 0.4%.
El acotado dinamismo de la economía del mayor productor mundial de cobre ha estado marcada por un complejo escenario externo y una débil inversión, en medio de un moderado ritmo del consumo y de otros sectores no mineros.
La demanda interna creció un 1.1% interanual en los tres meses a diciembre y acumuló igual variación en 2016. En tanto, la cuenta corriente de la balanza de pagos anotó un déficit de 3 mil 574 millones de dólares en 2016, equivalente a 1.4% del PIB.