Una creciente oferta no hizo mella en la demanda por bonos del Tesoro de Estados Unidos a 3 y 10 años que se subastaron ayer, una señal alentadora considerando las fuertes emisiones que se esperan enel año.
El Tesoro colocó $28 mil millones en papeles a tres años, a una tasa de un 2.436%, levemente menor a la esperada, lo que sugiere que hay una sólidademanda de los inversores.
La reapertura de bonos a 10 años por $21 mil millones tuvo un rendimiento de un punto básico bajo las expectativas. “Se puede considerar que es algo bueno, dado que este año se emitirán más y más bonos del Tesoro”, dijo George Goncalves, jefe de estrategia de tasas de Estados Unidos de Nomura Securities International.
El suministro de la deuda de Estados Unidos ha aumentado a medida que la Reserva Federal ha comenzado a retirar liquidez y reducir sus compras de bonos. El Gobierno también se vio obligado a impulsar la emisión para ayudar a financiar el plan fiscal del presidente Donald Trump y un acuerdo presupuestario de dos años.
Se espera que la carga de la deuda federal aumente hasta en $1.5 millones de millones debido a la reforma fiscal aprobada en diciembre, mientras que el acuerdo presupuestario aumentaría el gasto gubernamental en casi $300 mil millones durantelos próximos dos años.
El rendimiento del bono a tres años cotizó en un 2.425%, levemente menos que el máximo de 10 años de un 2.455% alcanzado el viernes.
La nota referencial del Gobierno a 10 años se negoció con un retorno de un 2.868%, bajo el 2.957% del 21 de febrero, que fue el nivel más alto desde que se negoció por encima del 3% en enero de 2014.