Un juez estadounidense desestimó una demanda contra Deutsche Bank AG y Credit Suisse Group AG, según la cual un fideicomiso judío intentó reclamar 3 mil millones de dólares que datan de antes de la era nazi en Alemania. El caso se centra en fondos que Karl Wertheim, hijo de un industrial judío-alemán, ingresó en cuentas de Credit Suisse en Suiza, a partir de 1931.
El fideicomiso Wertheim Jewish Education Trust, formado en 2016, dice que actúa en nombre de los legítimos herederos de la fortuna que poseía Wertheim, que murió en 1945. Wertheim heredó todos los activos comerciales de su padre Joseph Wertheim cuando Joseph murió en 1899, después de haber construido un “imperio corporativo” que valía “cientos de millones de dólares”, dice el juicio. Se estima que ese patrimonio vale 3 mil millones de dólares.
El fideicomiso dice que, a través de una compleja serie de eventos, los bancos se han negado a ayudar a los herederos legales a obtener el dinero desde 2006, según la orden del juez. Pero Kevin Michael Moore, un juez estadounidense de Florida, indicó el 6 de diciembre que descartaba el caso porque el tribunal carecía de “jurisdicción personal” sobre los bancos. Un portavoz de Deutsche Bank se refirió a una declaración anterior del banco en el caso, que señala que consideraba que los reclamos “estaban construidos e injustificados”.
Un portavoz de Credit Suisse en Londres declinó comentar al respecto. La queja dice que Wertheim temía la emergencia del antisemitismo en la Alemania de 1920, por lo que trasladó sus negocios a España y abrió una cuenta en Credit Suisse en 1931.
El banco suizo protegió los activos familiares durante la ascensión de los nazis en la década de 1930 y durante la Segunda Guerra Mundial, usando cuentas numeradas secretas, seudónimos y cuentas fiduciarias, de acuerdo con la denuncia. El fideicomiso demandó la devolución de los 3 mil millones de dólares, más intereses y honorarios de abogados.