La firma estadounidense de microprocesadores Qualcomm Inc. canceló los intentos por comprar en $44,000 millones NXP Semiconductors tras no lograr la aprobación regulatoria en China, convirtiéndose en una víctima de alto perfil de la guerra comercial entre las dos principales economías del mundo.
El mayor fabricante de chips para teléfonos inteligentes del mundo, y NXP, una empresa con sede en Holanda, confirmaron de forma separada que el acuerdo, que habría sido la mayor adquisición en el sector de semiconductores a nivel global, había sido cancelado.
El colapso del acuerdo probablemente agravará las tensiones entre Washington y Pekín, dañará la imagen de China como un regulador antimonopolio y desalentará los acuerdos que necesitan la aprobación del gigante asiático, según fuentes.