El ejecutivo de Volkswagen (VW) Oliver Schmidt, que será sentenciado esta semana en el marco del escándalo de emisiones de la automotriz alemana, le escribió al juez para decir que se siente “usado en forma indebida” por la compañía.
En agosto, Schmidt se declaró culpable en la corte del distrito de Detroit, en Estados Unidos, de irregularidades vinculadas a un enorme escándalo de emisiones en motores diésel que le ha costado a Volkswagen hasta $30 mil millones.
Su sentencia está fijada para el 6 de diciembre. “Debo decir que me siento usado en forma indebida por mi propia compañía en el escándalo del diésel”, escribió Schmidt al juez estadounidense Sean Cox, según una copia de la carta publicada por el diario alemán Bild am Sonntag.
Un portavoz de Volkswagen declinó a comentar, citando los procedimientos en curso. En virtud de un acuerdo para declararse culpable, Schmidt enfrenta una condena de hasta siete años en prisión y una multa de entre $40 mil y $400 mil tras admitir haber conspirado para engañar a los reguladores estadounidenses y violar leyes sobre la limpieza del aire.
En marzo, Volkswagen se declaró culpable de tres cargos criminales en virtud de un acuerdo para resolver acusaciones de Estados Unidos de que la automotriz instaló software secreto en vehículos para manipular pruebas de emisiones.
Los fiscales estadounidenses han presentado cargos contra ocho ejecutivos de Volkswagen actuales y pasados. Schmidt estuvo a cargo de la oficina medioambiental y de ingeniería de la compañía en Auburn Hills, Michigan.