Empresas chinas desembolsaron $200 millones para obtener contratos en Venezuela, según el diario español El País, que cita una investigación de la justicia de Andorra.
Los sobornos se habrían producido en el marco de un megacontrato de $20 mil millones, firmado en 2010 entre Venezuela y China para la construcción de infraestructuras energéticas y en el que solo participarían compañías chinas.
Los proyectos se financiaron principalmente con fondos del Banco de Desarrollo de China.
Las comisiones, obtenidas por Diego Salazar, un empresario de seguros venezolano, cercano al gobierno chavista, fueron ocultadas en Banca Privada de Andorra (BPA), y canalizadas a través de sociedades panameñas, entre ellas, Phomphien Corporation y Highland Assets.
Según la investigación de la justicia andorrana, Salazar se contactó con empresas chinas para adjudicarles contratos a cambio de “comisiones”.
Un acuerdo que llegó a manos de la jueza a cargo del caso señalaba que si la empresa china Camc Engineering conseguía obras licitadas por el Ministerio de Petróleo y Energía venezolano, la sociedad Highland Assets recibiría un 10% del volumen neto del negocio.
Los contratos fueron adjudicados a la compañía china y los pagos llegaron a la cuenta de la sociedad panameña en BPA, relata el diario español.
Desde 11 cuentas de Salazar en Andorra se habrían transferido fondos a altos funcionarios venezolanos, ante la pasividad de los ejecutivos de un banco que fue acusado por Estados Unidos de blanquear dinero.
Otras empresas chinas que utilizaron el mismo esquema de pagos fueron, según la investigación, Sinohydro Corp., China Machinery Engineering Corporation, Yutong Hongkong y Shandong Kerui Petroleum.