El presidente del Banco de la Reserva Federal (FED) de San Francisco, John Williams, anticipa que el balance de la FED será “mucho más pequeño” en unos cinco años, al final de un proceso de reducción que podría empezar con un “pequeño paso” este año. “¿Qué tan grande será el balance dentro de un lustro cuando haya pasado todo esto?”, dijo Williams en una entrevista en Singapur.
“Es algo que no decidimos. Será mucho más pequeño que el de hoy”. Las autoridades están uniéndose en torno a un plan para achicar gradualmente los $4.5 millones de millones en activos del banco central con un proceso predecible para minimizar las reacciones de los mercados.
El tema es evitar que se repita el llamado taper tantrum de 2013, cuando el por entonces presidente de la FED, Ben Bernanke, provocó un shock en los mercados globales con la mera sugerencia de que el banco central disminuiría las adquisiciones de activos.
Williams, que este año no vota políticas monetarias, dijo que el achicamiento será“aburrido” y se dará“de fondo”. El proceso dejará a la FED con activos que de todas formas serán mucho más grandes que los que tenía antes de la crisis.
“No es cuestión de si vamos a reducir mucho el balance”, acotó. “Más bien es que al final ese balance será de algo así como $2 millones de millones o $2.5 millones de millones. No lo decido. No lo hemos decidido”.
La visión de Williams coincide con la de Loretta Mester, de la FED de Cleveland, que tampoco vota este año.
En Alemania, ella predijo que la reducción del balance comenzará este año y se comunicará“en el momento correcto”. En un discurso pronunciado ayer en Singapur, Williams reafirmó su visión de que un total de tres aumentos de las tasas de interés este año tendría sentido en vista de los datos “muy buenos” de la economía estadounidense.