Las principales automotrices de Estados Unidos informaron sólidas ventas en junio impulsadas por las compras de vehículos utilitarios y camiones, apartando por ahora preocupaciones sobre el aumento de los precios del combustible, las tasas de interés más altas y las tensiones comerciales.
Las crecientes tensiones entre Estados Unidos y sus socios comerciales y las amenazas sobre la aplicación de aranceles al sector automotor han sacudido a la industria, lo que se suma a nueve años de recuperación tras la crisis financiera de 2008.
El mes pasado, los inversionistas liquidaron acciones de las fabricantes de automóviles de Detroit General Motors Co, Ford Motor Co y Fiat Chrysler Automobiles NV.
Aún así, junio fue un mes sólido para la demanda de vehículos en Estados Unidos y especialmente para los SUV y camionetas grandes que generan la mayor parte de las ganancias globales para las tres grandes compañías de Detroit.
Una encuesta realizada por Reuters mostró expectativas de una tasa anual ajustada estacionalmente de ventas de toda la industria automotriz en Estados Unidos de 17 millones de vehículos en junio.
La demanda de vehículos de Estados Unidos alcanzó un récord de 17.5 millones de vehículos en 2016.
El principal fabricante de automóviles estadounidense, General Motors, que dejó de informar números mensuales en abril, dijo que sus ventas aumentaron 4.6% a 758,376 unidades para el trimestre finalizado el 30 de junio, ayudado por camiones y todo terreno.
