El Gobierno chileno reiteró ayer que no dará marcha atrás en la decisión de aumentar un 16.8% el precio del gas en la región austral de Magallanes tras el anuncio de los ciudadanos de convocar un paro general para mañana miércoles.
“El miércoles se hace la paralización general, eso está definido”, dijo a los periodistas José Hernández, uno de los portavoces de la Asamblea Ciudadana de Magallanes, coordinadora de las protestas que se iniciaron el pasado día 5.
Los vecinos esperan volver a cerrar el acceso al aeropuerto de Punta Arenas, a 2 mil 244 kilómetros al sur de Santiago, y bloquear las calles de la ciudad e incluso la ruta al Parque Nacional Torres del Paine, uno de los principales atractivos turísticos del país.
La estatal Empresa Nacional del Petróleo decidió a fines de diciembre aplicar a partir del 1 de febrero esta subida a los usuarios de Magallanes, región que es prácticamente la única productora y además gran consumidora de ese combustible.
En tanto, el Gobierno advirtió que impondrá el orden público y no descartó aumentar el contingente policial en la región.
