La industria manufacturera de México se contrajo a su ritmo más acelerado desde 2011, según el indicador de fabricación PMI de IHS México.
El indicador general de fabricación bajó a 49, el punto más bajo en aproximadamente ocho años y medio desde que se mantienen registros y la tercera contracción mensual consecutiva.
“La última cifra de PMI destacó el deterioro más rápido en la fortaleza del sector desde que se inició la recopilación de datos”, dijo Pollyanna de Lima, economista de IHS Markit. Las empresas vincularon la recesión en parte a una producción débil y a una contracción en las ventas.
La débil demanda interna se reflejó en el índice de pedidos nuevos más bajo desde la puesta en marcha de la encuesta. Los pedidos del exterior mostraron un desarrollo positivo en agosto al revertir dos meses de contracción.
Los fabricantes mexicanos redujeron marginalmente el empleo en agosto tras no mostrar variaciones en junio y julio. El empleo en el sector manufacturero no ha crecido desde febrero, según el índice.
Los precios de los insumos de fábrica aumentaron al ritmo más rápido en siete meses debido a que la debilidad del peso frente al dólar estadounidense y los aranceles habrían elevado los costos de productos químicos, alimentos, metales y plásticos para los productores mexicanos. Sin embargo, las empresas no traspasaron los precios más altos a los consumidores. Un 96% de los fabricantes encuestados mantuvieron sus precios inalterados.
