El 2 de mayo se conocerá la oferta económica del consorcio Cruceros del Pacífico, compuesto por las empresas China Harbour Engineering Company (Chec) y Jan de Nul, único competidor en la licitación por mejor valor con evaluación separada que realiza la Autoridad Marítima de Panamá (AMP).
La semana pasada la compañía entregó su documentación técnica y oferta económica. Esta última fue depositada en el Banco Nacional de Panamá.
Ese día, personal de la compañía costarricense Meco recibió la orden de sus superiores de no entregar la documentación preparada para participar en la licitación para la construcción de la terminal de crucero en Amador. Así dejaron el camino libre para Cruceros del Pacífico.
Aceptada la única oferta, la próxima semana se conocerá si el precio ofertado por el consorcio está en línea con el costo calculado por la AMP, que también es custodiado por la entidad bancaria estatal.
El artículo 45 de la Ley de Contrataciones Públicas, que rige la licitación por mejor valor con evaluación separada, establece que: “en los casos en que se presente un solo proponente y este cumpla con los requisitos mínimos obligatorios y con la calificación que establezca el pliego de cargos, la entidad podrá adjudicar el contrato a ese único proponente, negociando un precio que en ningún caso excederá el precio estimado por la entidad licitante”. El total de puntos obtenidos por el consorcio en la evaluación de su propuesta técnica no podrá ser inferior al 80%.
Datos preliminares de la AMP indican que el proyecto, que se levantará en isla Perico en la calzada de Amador, requerirá una inversión entre 70 millones de dólares y 100 millones de dólares.
De acuerdo con la documentación técnica que presentó el consorcio Cruceros del Pacífico, la terminal tendría un área de 16 mil 430 metros cuadrados, incluyendo el muelle de 450 metros de longitud y 40 metros de ancho donde atracarían las embarcaciones.
En el pliego de condiciones, se estableció que la terminal debe permitir la llegada de dos embarcaciones, pero el diseño presentado por las empresas china y belga permite en el futuro añadir un segundo muelle, con lo cual, el puerto tendría la capacidad para manejar cuatro cruceros.
De acogerse la propuesta del consorcio Cruceros del Pacífico, el edificio contaría con paneles solares para la generación de energía eléctrica que se utilizaría en la operación del edificio, así como un sistema para reutilizar el agua lluvia.
Aunque no forma parte de la propuesta económica, el consorcio chino-belga incluyó en su diseño la instalación de un sistema de generadores eólicos, que se instalarían en el futuro sobre el rompeolas para aprovechar los vientos que se registran en la calzada de Amador.
Fuera del edificio que tendría una cobertura triangular para aprovechar la luz natural, se construiría un área de estacionamiento para 300 autos y una zona especial para 60 autobuses.
Actualmente, los cruceros que llegan a Amador tienen que trasladar a los pasajeros en pequeños botes hasta la calzada. La logística se complica debido a que los cruceristas son, en su mayoría, personas mayores de 50 años.
