El Gobierno se quedó corto en sus pronósticos, tanto de crecimiento económico como de los ingresos que esperaba producto de la reforma tributaria.
El ministro de Economía y Finanzas (MEF), Alberto Vallarino, se dispone a hacer una actualización de los ingresos que había proyectado hace dos años cuando presentó el plan estratégico de gobierno, que incluía una reforma fiscal, en vista de que están aumentado más de lo que se esperaba.
Este incremento obedece al impacto en las finanzas públicas de la reforma fiscal que entró en ejecución en julio de 2010 y al acelerado ritmo al que está creciendo la economía.
Cuando el MEF presentó el último paquete de reformas fiscales a finales de 2009, que contempló un alza del impuesto de transferencia de bienes muebles (ITBMS) del 5% al 7%, había proyectado ingresos adicionales por $200 millones anuales producto de la misma. Los ingresos totales del gobierno central aumentaron en $184.8 millones o 17.6% al cierre del primer trimestre del año, según un balance fiscal preliminar presentado por la Dirección General de Ingresos.
Los ingresos tributarios crecieron 37%, y entre estos los directos subieron un 34.3% y los indirectos, que son los que concentra el ITBMS, un 40.6%.
Vallarino reconoció que las recaudaciones se han visto impactadas adicionalmente por un crecimiento económico mayor del proyectado para 2010 y en lo que va de 2011, al igual que las proyecciones hasta 2014.
La firma consultora Indesa calcula que los ingresos del sector público no financiero deberían crecer a un ritmo muy rápido en 2011 (21.1%), debido a las reformas fiscales, así como también a la expansión del PIB nominal en más de 12% para este año.

