Es altamente probable que tanto usted como yo, apreciado lector, hayamos sido víctimas de alguna noticia falsa (fake news) divulgada a través de las redes sociales, y que el dedo macabro de algún tuitero nos haya manipulado para hacernos creer en algo que no es verdad.
Pero no se sienta mal, esto es muy común en nuestros tiempos, así que tome sus precauciones y estemos un poco más avispados (as) para evitar ser víctimas de los estrategas de la desinformación y el caos.
Según un estudio del Instituto de Tecnología de Massachusetts (MIT, por sus siglas en inglés) el año pasado las noticias falsas aumentaron un 365%, generando graves daños en la reputación de personas, instituciones y compañías. Se observó que las noticias falsas se difunden más rápido que aquellas cuyo contenido es verdadero.
Empresas como Facebook, Twitter y YouTube ya han comenzado a trabajar en esto. La solución no solo está en educar a las personas sobre el manejo responsable de la información, sino también en crear las capacidades tecnológicas para detectar y desconectar a los manipuladores de oficio de las redes sociales.
El último estudio sobre los avances en la materia lleva por título “Tendencias en la difusión de desinformación en redes sociales”, elaborado por investigadores independientes de la Universidad de Stanford y la Universidad de Nueva York.
El estudio mide las tendencias en la difusión de desinformación en Facebook y Twitter entre enero de 2015 y julio de 2018, y se centra en historias de 570 sitios que han sido identificados como productores de historias falsas. Los datos demuestran que las interacciones de sitios promotores de la desinformación en Facebook y Twitter subieron de forma sostenida hasta finales de 2016 y posterior a esa fecha se observó una caída de difusión de noticias falsas en Facebook, mientras que en Twitter la tendencia es creciente.
Facebook tiene meses trabajando en la implementación de herramientas de inteligencia artificial para detectar los contenidos falsos, ha aumentado el número de moderadores y ha creado una clasificación especial que permite establecer la confianza y credibilidad de los usuarios según la veracidad de la información que difunden.
Twitter ha profundizado en limpiar su plataforma digital de cuentas falsas y ha eliminado 70 millones de cuentas automatizadas en todo el mundo. El daño de las noticias falsas es muy alto, afecta la institucionalidad y la estabilidad social. Contrarrestar su efecto es tarea de todos.
El autor es consultor en comunicación estratégica.