Pese a que la guerra comercial que se está gestando entre Estados Unidos y China ha llevado al país asiático a comprar más soya brasileña, los exportadores estadounidenses han recibido un impulso de otros países.
Las inspecciones de soya para exportación alcanzaron las 818 mil 396 toneladas métricas en la semana que terminó el 14 de junio, más del doble de la cantidad del año anterior y un 21% más que la semana anterior, dijo el Departamento de Agricultura de Estados Unidos. Si bien una pequeña cantidad se destinó a China continental la semana pasada, la mayoría de los envíos se destinaron a países como Holanda, Egipto, Arabia Saudita y Vietnam.
China es el mayor consumidor mundial de soya, mientras que Brasil y Estados Unidos son los principales productores y exportadores. El cultivo es uno de los productos atrapados en la disputa comercial entre Estados Unidos y China. La administración Trump anunció una lista de objetivos tarifarios a finales de la semana pasada, y China dijo que procedería con gravámenes de represalia a algunos productos agrícolas. Incluso antes de introducirse tarifas oficiales, los compradores chinos ya habían recurrido en gran medida a Sudamérica.