Pilsemar, S.A. presta actualmente los servicios de practicaje a las embarcaciones que llegan a los puertos de Bahía Charco Azul y Bahía de Chiriquí Grande, que opera Petroterminales de Panamá.
En conferencia de prensa, el presidente de Pilsemar, capitán Clemente Forero, afirmó que la empresa siempre ha cumplido con todos los requisitos que la autoridad competente ha exigido, "pero la presente administración ha negado y omitido cumplir con su obligación".
De acuerdo con Forero, la AMP ha exigido requisitos no contemplados en el Reglamento de Practicaje, como exigir una concesión para la prestación del servicio profesional de practicaje.
A su juicio, esto es un ilícito porque se trata de imponer un requisito que no existe en la norma, ya que se trata de la prestación de un servicio profesional como el de un médico, abogado o ingeniero y no de un servicio público como el de lanchas, remolcadores, telecomunicaciones o puertos.
Como prueba de ello mencionó la violación de los artículos de la Constitución 40, 41, 17 y 18, además de los artículos 6 y 18 del Decreto Ley 7 de 1998 por el cual se creo la AMP, ya que en estos últimos se le obliga a promover el desarrollo de las empresas y resolver las solicitudes de las empresas.
Esta queja también fue presentada ante la Defensoría del Pueblo. El año pasado, Pilsemar interpuso un recurso ante la Procuraduría de la Administración en contra de la AMP.
Una fuente de la AMP dijo que la petición de renovar las licencias a los marinos de esta empresa no ha sido resuelta porque no se ha legalizado la concesión para prestar ese servicio.
