Para el deleite de los inversores bajistas y la consternación de los productores, el mantra de “más bajo por tiempo”, que ha dominado el mercado del petróleo, parece haber contagiado ahora al café.
Si bien se pronostica que la producción mundial no alcanzará el consumo la próxima temporada, el déficit será demasiado reducido para compensar el superávit actual, según Hannah Rizki, jefa de análisis de Volcafé, uno de los principales operadores de café del mundo. Esto significa que los precios, que el martes bajaron a un mínimo de más de 12 años, probablemente se mantendrán en un rango más bajo durante más tiempo, dijo Rodrigo Costa, director de la empresa brasileña Comexim, afincado en Estados Unidos.
Al igual que los productores de petróleo, que se han enfrentado a unos bajos precios desde que la OPEP comenzó su enfrentamiento contra los productores de shale en 2014, los cultivadores de café arábica tendrán que adaptarse. Brasil, el principal proveedor, sigue produciendo más granos, gracias a la devaluación de la moneda, en un momento en que los productores de costes más altos, como Colombia, Costa Rica y Perú, se enfrentan a dificultades después de que los precios cayeran por debajo de $1 la libra de peso (453,59 gramos).
“Un factor clave es que la temporada 2018-19 tuvo un superávit tan importante, gracias principalmente a la cosecha arábica récord de Brasil, que esencialmente supera el futuro déficit de 2019-20”, dijo Rizki en una entrevista durante una conferencia de la Asociación Nacional del Café en Atlanta la semana pasada.
El mercado mundial del café se enfrentará a una escasez de 3 millones de sacos en la temporada 2019-20, que comienza en octubre en la mayoría de los países, pronostica Volcafe, la unidad de café de ED&F Man Holdings Ltd.

