Representantes de la Unión de Capitanes y Oficiales de Cubierta (UCOC) presentaron una querella penal contra varios funcionarios administrativos del Canal. A Esteban Sáenz, vicepresidente Ejecutivo de Operaciones; Rogelio Gordón, gerente ejecutivo de la División de Recursos de Tránsito y el capitán Max Newman se les señala por la supuesta comisión del delito de inviolabilidad del secreto y derecho a la intimidad.
A los funcionarios se les acusa de grabar las conversaciones que se originaran en los teléfonos de la oficina de la UCOC, lo cual, a juicio de los querellantes, no tiene validez jurídica, y representa una posible violación de tipo penal que sanciona a quien sin autorización judicial viole el secreto y derecho a la intimidad.
La Autoridad del Canal de Panamá (ACP) señaló que no intercepta ni realiza espionaje telefónico a sus empleados. El manual de operaciones establece que las comunicaciones de la vía son grabadas continuamente con el fin de asegurar que se preserven con exactitud los hechos importantes relacionados con la operación. La entidad advirtió que la querella tiene el propósito de distraer a la opinión sobre los hechos de abril, cuando capitanes de remolcadores desatendieron una instrucción de trabajo y se afectó la operación de la vía.
