La junta directiva de la Superintendencia de Seguros y Reaseguros de Panamá (SSRP) ordenó la liquidación forzosa de la compañía Seguros BBA.
El regulador había tomado el control administrativo de la compañía el pasado 16 de mayo, tras advertir faltas en el régimen de prevención de blanqueo de capitales, incumplimiento de las obligaciones de protección al consumidor, comercialización de productos sin la autorización de la SSRP y en la operación de negocios sin los reaseguros adecuados.
El superintendente de Seguros, José Joaquín Riesen, nombró en ese momento una junta de administradores interinos, que recomendó la liquidación forzosa de la compañía luego de constatar “malos manejos administrativos”, falta de apego a prácticas de gobierno corporativo, manipulación de la información financiera, incumplimiento en el pago de las reclamaciones de los afectados, primas por cobrar vencidas con morosidad superior a 90 días, pólizas emitidas sin respaldo de reaseguradores, así como incumplimiento en los márgenes de solvencia, liquidez y patrimonio que establece la ley de seguros.
La empresa tiene una insuficiencia patrimonial de $5.2 millones.
Los activos que le quedan no serán suficientes para cubrir las obligaciones, máxime cuando un banco de la localidad había estado informando que tenía un plazo fijo de la aseguradora sin gravámenes, pero en una última comunicación informó que esa cuenta estaba pignorada.
Vinculada al empresario venezolano Leopoldo Castillo Bozo, BBA recibió autorización del regulador en 2008 y un año después inició operaciones en el país.
Entre 2016 y 2017, la empresa fue objeto de un plan de regularización por parte de la SSRP, que además le ha impuesto numerosas multas, dos de ellas de $250 mil, por incumplir las normas de prevención de blanqueo de capitales.
Esta es la sexta liquidación forzosa que ordena la actual administración de la Superintendencia de Seguros, después de Seguros Confianza, Seguros Constitución, Alliance Re Reissurance, Casualty Re e Istmo Compañía de Reaseguros.
