Apple ha decidido trasladar la producción de uno de sus modelos de ordenador, el nuevo Mac Pro, de Estados Unidos a China, informó el The Wall Street Journal, en momentos en que los dos países están inmersos en una guerra comercial.
El anuncio se dio antes de que los presidentes de China y Estados Unidos anunciaran que retomarían las negociaciones comerciales durante un encuentro sostenido en el G-20.
Según el periódico económico estadounidense, que cita fuentes anónimas, la firma ha seleccionado a Quanta Computer, una empresa taiwanesa, para ensamblar sus dispositivos cerca de Shangái, en China.
La producción de este modelo se hace actualmente en Texas.
Aunque el Mac Pro es un pequeño negocio de nicho para Apple, esta decisión podría desatar la ira del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, que pide reiteradamente a las empresas que produzcan en territorio nacional.
La decisión de la compañía puede parecer sorprendente debido a la imposición recíproca de fuertes aranceles entre Pekín y Washington, lo que seguramente aumentará el precio de este producto para los consumidores estadounidenses.
Habrá que esperar la reacción de Trump ante el posible traslado.