Royal Dutch Shell Plc se ha asociado con algunos de los mayores fabricantes de coches del mundo para ampliar su negocio de recarga de vehículos eléctricos en Europa mientras se prepara para un futuro más allá del petróleo.
La segunda petrolera del mundo en tamaño ha llegado a un acuerdo con Ionity -una asociación entre BMW Group, Daimler AG, Ford Motor Co. y Volkswagen AG - para abrir estaciones de recarga en 10 países europeos, dijo Shell ayer. El acuerdo se suma a la adquisición por parte de Shell del mayor proveedor de recarga de vehículos eléctricos de Europa, NewMotion, el mes pasado.
La industria del petróleo está atravesando una fase crítica en su historia, con el desafío al predominio de la gasolina y el diésel por la necesidad de una energía más limpia. Los mercados, entre ellos Francia, Reino Unido y China, están hablando de la eliminación gradual de la venta de automóviles a base de combustibles fósiles en las próximas décadas, y las principales compañías de energía están tratando de adaptarse.
