Los mercados globales, preocupados por la retórica de guerra entre Corea del Norte y Estados Unidos, recibirán esta semana las minutas del último encuentro de la Reserva Federal (FED) estadounidense para confirmar la idea creciente de que el organismo reduciría el impulso de su ajuste monetario.
Los inversores operan con una aversión al riesgo que no se veía desde el año pasado, mientras crecen las amenazas bélicas entre Pionyang y Washington.
Algunos analistas creen que las acciones mundiales podrían seguir descendiendo en el corto plazo.
“Todavía no estamos muy sobrevendidos, por lo que el mercado aún tiene más margen de caída. La gente se pone nerviosa por las tensiones políticas entre Corea del Norte y Estados Unidos”, dijo Robert Pavlik, jefe de estrategia de Boston Private Wealth. Cada vez más operadores piensan que el banco central estadounidense se limitará a iniciar la contracción de su hoja de balance.
Una clave provendrá de las actas del ente dirigido por Janet Yellen.

