Vendió su compañía de internet en miles de millones de dólares y luego le apostó a una startup de vehículos eléctricos, publicando frecuentemente al respecto en las redes sociales. Posee acciones de Tesla Inc., maneja sus autos y está construyendo una fábrica en China.
Pero no es Elon Musk. Por el contrario, el multimillonario chino He Xiaopeng es el blanco de la cólera de Musk, y su compañía, Xpeng Motors, se encuentra en el centro de las demandas de secretos comerciales presentadas por Tesla y Apple Inc. Tesla acusó a uno de sus exingenieros de robar información confidencial sobre el piloto automático antes de salir corriendo a ocupar otro cargo en XPeng, donde He es presidente.
Apuesta tecnológica
He, de 41 años, calificó la demanda de “cuestionable” en un mensaje de WeChat. Las acusaciones se produjeron ocho meses después de que uno de los exempleados de Apple Inc., fue acusado de intentar llevar secretos confidenciales de un robocar a su nuevo puesto en XPeng.
Apple o Tesla no han acusado a la automotriz china de cometer delitos.
En una entrevista el 12 de marzo en sus instalaciones de Guangzhou, He habló con desdén sobre los trabajadores que roban propiedad intelectual.
“Yo mismo era ingeniero informático y sinceramente respeto la propiedad intelectual. No nos gustaría que nuestros empleados nos quitaran la propiedad intelectual. Nos importa mucho el talento, pero no perseguimos lo que otras compañías han hecho porque eso no ayudará a aumentar nuestra competitividad”, dijo He.
La propiedad intelectual no es el único frente en esta batalla. También está el flujo de caja. Xpeng está aprendiendo a quemar efectivo como Tesla y otros fabricantes rivales de vehículos eléctricos. La fábrica de Xpeng está actualmente en construcción, y queda aproximadamente a una hora de su oficina principal en Guangzhou.
He está tratando de mantener el ritmo de la construcción de la fábrica de Tesla en Shanghái.