Hace tres años Tocumen anuló el contrato que la pasada administración había otorgado para el aseo de la terminal uno de pasajeros.
En ese momento se tomó la decisión bajo el argumento que las condiciones financieras no eran las mejores para el aeropuerto. En el contrato adjudicado al grupo Ecocaribe, por un periodo de cinco años y un monto de 19 millones de dólares, se estableció un pago adelantado de 3.8 millones de dólares. Este pago sería utilizado por la compañía para comprar los equipos que necesitaría para cumplir con el contrato.
Ahora, Tocumen retomó los planes para adjudicar el aseo de la terminal uno de pasajeros, pero incluyendo la terminal de carga, y otros edificios del aeropuerto, así como las aceras y estacionamientos.
Cuatro grupos presentaron propuestas para quedarse con el contrato que fue estimado en 5.3 millones de dólares con una duración de dos años.
Las empresas que atendieron al llamado de Tocumen fueron: Consorcio Limpieza Internacional de Tocumen (Hombres de Blanco Corp; Medokkal, S.A. y Constructora Selva Negra); Sicarelle Holdings; Consorcio Interaseo (Interaseo SAS y ESP y Administración e Inversiones del Istmo) y Consorcio Manuquinsa Metro Waste Cleaning Hub (Panama Waste Management, Metro Waste Managment y H&H Manufacturas Químicas y Servicios Sociedad Anónima).
Tres de las propuestas fueron por 4 millones 795 mil 714 dólares, y una por 4 millones 795 mil 715 dólares. Le tocará a la comisión evaluadora determinar que grupo cumple con los requisitos técnicos exigidos en el contrato para determinar a un vencedor.
Inicialmente, Tocumen solicitaba una experiencia de 10 años en la limpieza de edificios con una superficie de 50 mil metros cuadrados, pero tras una solicitud de las compañías interesadas se bajó el rango de experiencia a cinco años, pero se elevó el metraje a 70 mil.
También se eliminó el requisito de presentar una certificación de recomendación por parte del gobierno en caso de que la compañía hubiese prestado un servicio de limpieza a un ente estatal. Dicha carta debía estar firmada por la Contraloría, pero al final Tocumen aceptó que la misma solo fuera notariada.