Toyota Motor Corp. podría dejar de importar algunos modelos a Estados Unidos si el presidente Donald Trump aumenta los aranceles a los automóviles, mientras que otros carros y camiones que están en las salas de exhibición serán más caros, según el responsable para Estados Unidos de la automotriz.
El fabricante de automóviles japonés está activamente analizando escenarios sobre cómo los esquemas arancelarios podrían afectar a cada una de sus líneas de automóviles y camiones, dijo Jim Lentz, máximo ejecutivo de las operaciones de Toyota en Estados Unidos.
“Si termina siendo 10% o 25%, casi sobre una base de serie por serie tenemos que evaluar qué vamos a hacer”, dijo en una entrevista. “En algunas series podemos aumentar los precios. En otras series podemos detener las importaciones y entonces los consumidores tendrán menos opciones”.
El Departamento de Comercio de Trump celebró una audiencia sobre su investigación para determinar si las importaciones de vehículos de pasajeros ponen en peligro la seguridad nacional de EU. Lentz dijo que esta idea es totalmente errónea.
En cuanto a la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte entre EU, México y Canadá, Lentz señaló que favorece las negociaciones a tres bandas, no el acuerdo separado entre EU y México que Trump dijo esta semana que estaba considerando.
Toyota está en proceso de construir su décima primera fábrica en EU, una planta conjunta de ensamblaje de automóviles con Mazda Motor Corp.