A dos días de su reunión con su homólogo Xi Jinping, un enérgico Donald Trump advirtió sobre un aumento de la guerra comercial al decir que está pronto para gravar todos los bienes chinos aún no castigados por aranceles estadounidenses.
Los mercados están ansiosos por ese encuentro del sábado entre Trump y Xi, pues esperan que allane el camino hacia una resolución del pleito entre las dos mayores economías mundiales.
Baja de arancel
Trump no se preocupó por calmar esa ansiedad de inversores, economistas y gobiernos del mundo y volvió a mostrar disposición a seguir aplicando mano dura.
“La economía de China se está viniendo abajo, quieren hacer un acuerdo”, dijo Trump en una entrevista con Fox Business News a solo unas horas de viajar a la Cumbre del G20 en Japón y mantener su reunión bilateral con Xi.
Trump ya impuso aranceles a bienes chinos importados por $200,000 millones para forzar a Pekín a respetar los derechos de propiedad intelectual y terminar con prácticas comerciales que considera desleales.
Pekín ha respondido con un progresivo aumento de los aranceles a productos estadounidenses, que cubren desde junio casi $110,000 millones sobre un total de $120,000 millones de importaciones. Trump indicó firmemente que está listo para aplicar aranceles a todo el resto de lo importado de China, lo que equivale a más de $300,000 millones.

