Panamá no puede darse el lujo de esperar, “es urgente” que la Asamblea Nacional legisle y apruebe el proyecto de ley que reforma el sistema financiero para evitar que el sector bancario y de servicios legales pierda competitividad frente a otras jurisdicciones como Colombia, Brasil y Estados Unidos.
Así lo alertó ayer el ministro de Economía y Finanzas, Dulcidio De La Guardia, ante la audiencia de “Café con La Prensa”, un foro mensual que en esta ocasión tuvo como plato fuerte los cambios plasmados en un proyecto de ley para darle carácter legal a nuevos modelos de negocio como las Fintech y que se incentive el establecimiento de plataformas de compraventa, administración y custodia de criptomonedas, emisión de dinero electrónico y otras actividades relacionadas con soluciones de pago.
De La Guardia aprovechó la oportunidad para precisar que no se trata de un instrumento para beneficiar a un gobierno en particular, ni tampoco para buscar un interés político: es una legislación que permitirá colocar al país en la vanguardia del mercado internacional, ya avanzado en materia de regulación y fomento de modelos de negocio como las Fintech, el crowdfunding, un mecanismo de recolección colectiva para levantar capital, además de los family offices, administradoras de capitales familiares y otros instrumentos, y plataformas financieras y de servicios.
“No podemos esperar a 2020 para que se apruebe. Debe ser ahora o perderemos competitividad como país de servicios financieros y legales”.
Precisó que las propuestas del MEF no implican que las actividades de las Fintech estarán exentas de regulaciones contra el lavado de dinero y para evitar el financiamiento al terrorismo; al contrario, tendrán que cumplir con todas las normativas.
Otra ley que es urgente que se apruebe es la que lleva a la categoría de delito el fraude fiscal, para penar a quienes cometan dolo contra el fisco nacional desde los 300 mil dólares en adelante.
“Esta ley es urgente, forma parte de las normativas internacionales que se exigen para cumplir con la transparencia financiera, ya el mundo cambió y Panamá tiene que adaptarse o corre el riesgo de caer en otra lista”.
El ministro sostuvo que a Panamá aún le falta contar con un sistema judicial más robusto para dar un mensaje claro a los agentes económicos en materia de transparencia. “Si tuviéramos un sistema judicial más robusto, recibiríamos más inversión extranjera directa”, apuntó.
