Las predicciones de un rescate del sistema financiero en China se están generalizando. Lo que antes era una previsión exclusiva de inversores permanentemente bajistas y vendedores al descubierto está siendo adoptado cada vez más por los economistas de algunos de los principales bancos y firmas de corretaje del mundo.
Nueve de quince encuestados en un sondeo de Bloomberg a finales del mes pasado, entre ellos Standard Chartered Plc y Commonwealth Bank of Australia, vaticinaron que el Gobierno chino financiará una recapitalización en un plazo de dos años. Entre los que proporcionaron estimaciones sobre el coste, una mayoría dijo que excederá los $500 mil millones.
Si bien un rescate de estas dimensiones distaría mucho de la previsión de $10 millones de millones del gestor de fondos estadounidense Kyle Bass en febrero, las respuestas reflejan un temor generalizado a que los bancos chinos tengan dificultades para hacer frente al aumento de los préstamos en mora.
Si bien algunos analistas opinan que la recapitalización estatal fortalecería el sistema bancario, el 80% de los encuestados pronosticó que el anuncio de un rescate afectaría a los mercados chinos, asestando un golpe a los valores del sector bancario y al yuan y propiciando el aumento de los costes de financiación del Gobierno y del riesgo crediticio.