La economía de la zona euro volvió a crecer con fuerza en el segundo trimestre del año y el doble que Gran Bretaña por segunda vez consecutiva, según estimaciones preliminares de la agencia de estadísticas de la Unión Europea (UE) publicadas ayer.
La medición confirma la tendencia de una recuperación del bloque de 19 países, que se inició este año, mientras que Gran Bretaña comienza a sentir el impacto negativo de su decisión de dejar la UE.
Eurostat dijo que el producto interno bruto de la zona euro creció 0.6% en el segundo trimestre en una tasa intertrimestral y 2.1% en una tasa interanual, en línea con los pronósticos de un sondeo de Reuters a economistas.
En los tres meses a junio, la actividad económica en Reino Unido creció 0.3% frente al trimestre anterior, algo más que el 0.2% que en el período inmediatamente anterior.
La ralentización de Gran Bretaña ocurre después de que creció con fuerza el año pasado, superando a la zona euro en los últimos tres trimestres.
Mientras tanto, la economía de la zona euro se ha acelerado, impulsada por el optimismo empresarial, el fuerte consumo interno y la disminución del desempleo, que en junio alcanzó su nivel más bajo desde 2009.
“En general, la economía de la zona euro completó el primer semestre en un estado muy saludable y parece estar bien preparada para seguir creciendo firmemente el resto de 2017”, dijo Bert Colijn, economista de ING.
El mejor estado de la economía del bloque respalda los planes del Banco Central Europeo (BCE) de empezar con el endurecimiento de la política monetaria en el otoño boreal, aunque la inflación general continuó estable en 1.3% en julio, menos que el objetivo del BCE, inferior pero cerca del 2%.
El ‘brexit’ y la banca
La industria de finanzas del Reino Unido podría perder hasta 40 mil empleos en banca de inversión en los próximos años, a menos que alcance un acuerdo benigno sobre su divorcio de la UE, de acuerdo con un nuevo reporte emitido por la consultora Oliver Wyman.
Los bancos prevén actualmente el peor escenario en que el perderían acceso al mercado único de la UE una vez que el Reino Unido deje el bloque en 2019, y sostienen que no tienen tiempo para esperar a ver cómo se desarrollan las conversaciones en torno al brexit.
Citigroup, Bank of America y Morgan Stanley, así como el británico Barclays, han indicado en el último mes que están finalizando planes para instalar filiales dentro de la Unión Europea.
“Los bancos están trabajando bajo la consigna de ‘sin arrepentimientos’, que incrementa las opciones, pero que no cuestan demasiado en caso de seguir adelante o revertir decisiones”, dijo Matt Austen, jefe de servicios financieros de Oliver Wyman en el Reino Unido.

