La Cámara de Comercio, Industrias y Agricultura de Panamá (Cciap), una de las principales organizaciones del sector privado, advirtió sobre la necesidad de revisar a conciencia el presupuesto general del Estado para 2022, a fin de alinearlo con la realidad nacional y con una estrategia de desarrollo sostenible debido a la crisis socioeconómica actual.
El presupuesto del Estado para 2022, que asciende a $25,126 millones, asigna mayores recursos a gastos de funcionamiento y planillas en salud, educación y seguridad, indica el boletín Cámara Opina. En cambio recorta el gasto de capital al Ministerio de Educación en $28 millones, en un año en que el sistema educativo requerirá de grandes inversiones para mantener las medidas de bioseguridad que garanticen la presencia en las aulas.
El gremio considera “crucial” que el presupuesto del Estado esté ceñido a una política fiscal anticíclica, que genere una reducción importante en el gasto de funcionamiento, a fin de incrementar el ahorro corriente, para financiar un porcentaje razonable de la inversión pública priorizada.
Cuestiona el aumento del gasto corriente de la Asamblea Nacional en $29 millones en un nuevo año fiscal en que se espera que el Legislativo contenga sus gastos operativos y maneje los recursos de manera eficiente.
“La asignación de presupuestos a planillas políticas y/o proselitistas resulta frustrante para los sectores productivos que realizan ingentes esfuerzos para mantener empleos y reactivar la economía. Es el momento de finalmente invertir en infraestructura pública básica, como agua, saneamiento y disposición de desechos, que llegue a todos los habitantes del territorio nacional”, señala.
La Cciap sugiere revisar las leyes especiales que conceden aumentos automáticos y que en tres años sumaron erogaciones por $906 millones. También le preocupa los recortes en turismo que impiden el equipamiento del Centro de Convenciones de Amador y que el Fondo de Promoción Turística pueda posicionar a Panamá como destino.