En diciembre deben reiniciar los trabajos de construcción del primer tramo del denominado corredor de las playas, que fue reducido por la actual administración a un viaducto de 6 kilómetros.
El proyecto fue reformulado por el Ministerio de Obras Públicas (MOP) tras contabilizar en más de $180 millones los costos de indemnización y reubicación de servicios públicos que no fueron incluidos en el contrato original, adjudicado en 2018 al consorcio Corredor de las Playas, integrado por las empresas FCC Construcción, S.A. y Cicsa.
La obra iba a tener un costo de $603 millones, pero tras el recorte hecho por el MOP, se redujo a $200 millones.
Concebida primero como una autopista de 32 kilómetros, el proyecto se redujo a una tercera parte e iniciará en el sector de La Espiga, al final de la autopista de La Chorrera, y culminará en el sector de la Hacienda Los Calderones.
El titular del MOP, Rafael Sabonge, calcula que en noviembre terminará todo el proceso de cesión del contrato a favor de la empresa Puentes y Calzadas Infraestructura de Panamá, luego que el contratista original solicitó salir del proyecto. Con esta cesión, FCC, con su socio Cicsa, se retira y solo recibió pagos por los trabajos que desarrolló. La nueva empresa se encargará de completar lo que está pendiente, según la reformulación.
Sabonge comentó que los trabajos, que tienen un avance físico de 3.5%, podrían reiniciar en diciembre. Agregó que después de que el MOP aprobó la cesión del contrato, el proceso pasó al Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), que debe revisar los términos financieros, así como los pagos.
Indicó que de los $200 millones que se estima costará ahora el proyecto, faltan por ejecutar $141 millones. Además de los planos, diseños y otros estudios, el contratista original solo avanzó con la instalación de algunos pilotes en el sector de La Espiga.
La empresa española Puentes y Calzadas Infraestructura, S.L.U., sucursal de Panamá, que tiene como representante a Ismael Barral Noya, es conocida en el MOP. Actualmente, construye la carretera de 102 kilómetros entre Mariato y la entrada al poblado de Atalaya, en la provincia de Veraguas, por $78.5 millones.
También se adjudicó, en 2019, la construcción del paso vehicular e intercambiador vial José Agustín Arango (Cabuya)-CPA-24 de Diciembre, por $78.3 millones, y participó en el consorcio que se encargó de la construcción de los caminos y calles del distrito de La Mesa (Veraguas), por $33.5 millones.
Además de recortar el alcance del tramo I, el MOP canceló la construcción del tramo II, que también sería ejecutado por FCC y Cicsa. Nuevamente, el pago de indemnizaciones no calculadas dentro del contrato hizo que el MOP decidiera no continuar con el proyecto, valorado en $349 millones.
El corredor de las playas fue dividido en dos tramos. El primero iniciaría en La Chorrera, hasta la comunidad de Santa Cruz, mientras que el segundo se extendería hasta San Carlos. El objetivo era reducir el congestionamiento vial que se registra en esa zona.
Luego de recortar el tramo I y cancelar el segundo segmento del proyecto, el MOP apuesta a la construcción de una autopista de unos 50 kilómetros, entre el puerto de Vacamonte y la comunidad de Sajalices, Capira, ambos en la provincia de Panamá Oeste.
El gobierno está a la espera de los estudios finales que realiza la Corporación Financiera Internacional (CFI), para estructurar la licitación de la autopista, que se construirá bajo la modalidad de Asociaciones Público Privadas (APP).
“Será una autopista por peaje y tomará unos 22 minutos llegar de Sajalices a Arraiján”, comentó Sabonge. La autopista hasta Sajalices forma parte de una red vial que iniciará en Veracruz, Arraiján.
Actualmente, se construye la conexión entre Veracruz, El Chumical y Vacamonte, obra que tiene un avance superior al 30% y que tendrá un costo de $20.7 millones.
Esta obra conectará con la ampliación de la carretera entre la autopista de La Chorrera y el puerto de Vacamonte, que en los próximos días recibirá la orden de proceder. Tendrá un costo de $57.8 millones.