La Covid-19 ha modificado los hábitos de consumo de miles de personas; ahora debido a las restricciones de movilidad por la cuarentena más consumidores están recurriendo a las compras en línea.
“Es una tendencia que se mantiene e irá creciendo entre los consumidores, independientemente de la generación, de hecho, es poco probable que las personas que han probado y experimentado el beneficio de comprar en línea por primera vez, vuelvan a sus viejos patrones”, dijo Annie Muñoz, directora de Administración de Categorías para Latinoamérica de la empresa de medición de mercado Nielsen.
Muñoz, que participó ayer como panelista en el Café con La Prensa, de manera virtual, explicó que comprar en línea es una tendencia que se ha generalizado en renglones menos tradicionales debido a los reajustes que han tenido que realizar los consumidores por las restricciones de presupuesto debido a la pandemia.
“Más personas están dispuestas a comprar a través de los canales digitales productos de abarrotes (café, aceite, pan empacado y salsa); artículos de limpieza, aseo personal, así como productos locales o de origen”, manifestó.
Si bien la cuarentena, para frenar la propagación de la Covid-19, ha sido positiva para los comercios minoristas electrónicos a nivel mundial, la tendencia es aún más relevante en Latinoamérica donde las ventas online están despegando. “La tasa de crecimiento de las compras en línea en países emergentes [con poco arraigo a este tipo de transacciones] está entre un 15% a 20%, en tanto, en los países más maduros el crecimiento es de entre un 8% a 10%”, dijo la directora de Administración de Categorías para Latinoamérica de la empresa de medición de mercado Nielsen.
En Panamá por lo general, los consumidores prefieren hacer sus compras en tiendas físicas, no obstante, este escenario puede ser aprovechado por los comerciantes para expandir su mercado. De hecho, según una medición de mercado, un 67% de las empresas van a invertir más en canales virtuales y aplicaciones para sus consumidores.
El gran reto será “desarrollar una estrategia consistente para satisfacer las necesidades de los compradores, convirtiendo el comercio electrónico en una opción de compra válida y habitual”, sostiene Muñoz.
Compras físicas
Los sectores vinculados con la economía doméstica, a excepción de los supermercados, fueron los primeros en experimentar el coletazo del coronavirus. Las ventas en los centros comerciales están al 0%, según fuentes del sector.
Al panameño le gusta comprar en tiendas, pero al estar todos los comercios cerrados y por un tema de necesidad, las personas han tenido que elegir los canales digitales, opción que no ha tenido mucho auge ni entrada, agregó Nadkyi Duque, presidenta de la Asociación Panameña de Centro Comerciales (Apacecom).
Los centros comerciales se mantienen con sus operaciones detenidas desde el pasado mes de marzo, lo que ha generado un cierre de 90% de los comercios y la suspensión laboral de más de 50 mil trabajadores.
Para Duque es “insostenible” esta situación, pues mientras no se generen ingresos y el dinero no circule será muy difícil reactivar la economía. Aboga por una reactivación de los sectores económicos tomando todas las medidas sanitarias necesarias para una apertura segura.
En el caso de la Apacecom, se han tomado más de 50 medidas, dijo Duque. “Empezamos por la limpieza y sanitización de todas las áreas, hemos invertido considerablemente en la compra de equipo de limpieza, cámaras para conteo de personas que ingresan al centro comercial para controlar el aforo, sistemas tecnológicos para la toma de temperatura, establecimiento de puestos dispensadores de gel alcoholado en los pasillos y un plan de comunicación para los visitantes”, agregó.
Consultada sobre la opción de una apertura escalonada, la empresaria manifestó que bajo un escenario de cuarentena total, no resulta rentable.
“Si se mantiene la cuarentena total con un horario restringido en el que la persona solo puede salir tres horas a comprar, solo en el transporte e ir a hacer las compras del supermercado se le va el tiempo, entonces, con un panorama de cuarentena total no es rentable para ningún comercio abrir. La alternativa es ver como se bajan estos índices de contagio para poder decir que hay una luz en el camino”, señaló.
Los centros comerciales se encuentran en el tercer bloque, que aún está pendiente por una fecha de reapertura.