Las acciones de Lenovo Group Ltd., subieron al máximo en un año después de registrar ganancias que superaron la estimación más alta de los analistas y al manifestar que sus fábricas estaban enfrentando el brote de coronavirus.
El proveedor de computadoras personales más grande del mundo, que compite con HP Inc., y Dell Technologies Inc., advirtió sobre “volatilidad y desafíos a corto plazo” debido a interrupciones en sus proveedores y al transporte de componentes. Sin embargo, anunció que la mayoría de sus plantas habían reiniciado sus operaciones y que la demanda debería recuperarse una vez que el brote se estabilice. La acción subió un 7%, el mayor repunte desde el 21 de febrero de 2019.
El coronavirus ha demostrado el papel cada vez más central que juega China en la fabricación global, desde vestuario y productos químicos hasta automóviles y especialmente tecnología.
Lenovo depende de su vasta red en China para fabricar productos desde computadoras portátiles hasta servidores. También opera una megafábrica de electrónica en Wuhan, el epicentro del brote. El director ejecutivo, Yang Yuanqing, advirtió que la epidemia que estalló el mes pasado provocaría una “gran guerra” para la compañía y una cadena de suministro centrada en la ciudad de Shenzhen, en el sur de China. Lenovo presentó una evaluación más optimista al señalar que está lidiando con impactos a corto plazo.