Moody’s Investors Service Inc. rebajó la calificación de los bonos de Petróleos Mexicanos a basura, al tiempo que la caída de los precios del petróleo y una pandemia de rápida expansión fueron el golpe de gracia para el perforador mexicano.
Moody’s recortó los bonos de Pemex de Baa3 a Ba2, el segundo nivel basura más alto, porque no pudo ofrecer una estrategia viable para detener las caídas de producción a largo plazo, dijo.
“Las medidas tomaron en consideración nuestras expectativas para un período prolongado de flujo de caja libre negativo y la necesidad de financiamiento externo, a pesar de los esfuerzos de la compañía para ajustar los costos y las inversiones a los bajos precios del petróleo”, dijo en un comunicado.
Las agencias de calificación han sido escépticas respecto de que el presidente izquierdista de México, Andrés Manuel López Obrador, conocido como AMLO, tiene un plan creíble para revertir los 15 años de disminución de la producción de petróleo de Pemex y reducir la deuda financiera que alcanzaba los $83 mil 900 millones que a fines del año pasado, la más alta entre cualquier petrolera importante. Las pérdidas de Pemex casi se duplicaron en 2019, su primer año bajo la administración de López Obrador.
Pemex está en el corazón de la estrategia de AMLO para revertir tres décadas de políticas neoliberales y hacer que México sea energéticamente autosuficiente. Pemex ahora tiene el mandato de construir una nueva refinería de $8 mil millones en el estado natal de López Obrador, pese a que sus seis refinerías existentes están operando a un tercio de su capacidad.
AMLO también canceló subastas de petróleo y gas, y contratos de empresas conjuntas con Pemex que le permitieron compartir la carga del desarrollo del vasto territorio petrolero de aguas profundas de México, y aumentar las reservas agotadas.
Moody’s había sido un caso aislado entre las agencias de calificación, debido a que tanto Fitch Ratings como S&P Global Ratings ya habían recortado los bonos de Pemex este año.
Fitch otorgó a Pemex un nivel basura aun peor en abril, cuando rebajó su calificación a BB.