Los tres de fondos de pensión y cesantía privados en Panamá reportaron la administración de $677 millones hasta el mes de noviembre de 2021.
De acuerdo con la data que reposa en la Superintendencia del Mercado de Valores (SMV) se trata de un aumento de $34 millones en los fondos administrados por Progreso, ProFuturo y Quantia, cuando se comparan los resultados de 2021 contra 2020.
Estos fondos corresponden a los planes de ahorro individual que trabajan de manera continua y acumulativa para la construcción de un capital que complementará la pensión que otorga la Caja de Seguro Social (CSS) a los trabajadores.
Debido a la situación de estrechez financiera que han tenido muchos trabajadores durante la pandemia, se hubiese pensado que estos ahorros podrían haber disminuido, pero ocurrió todo lo contrario. Creció el monto y la cantidad de afiliados.
La lectura que se le da a lo interno de la SMV es que quienes han conservado sus fuentes de ingreso pueden estar más preocupados por el futuro a mediano plazo.
En este punto hay dos elementos importantes. Por un lado estos ahorros podrían ser una tabla de salvación en caso de quedar desempleados, y por el otro, son vistos como una fuente de ingreso elemental ante la crisis agravada que experimenta el subsistema exclusivamente de beneficio definido de Invalidez, Vejez y Muerte (IVM).
Además, otro factor clave para el aumento de los ahorros privados es que debido a las restricciones por el confinamiento de 2020, se impuso un esquema moderado de consumo, lo que le ha dado la oportunidad a algunos ahorristas de destinar más fondos a sus cuentas privadas de pensiones.
Al cierre de 2021 en los fondos privados de pensiones habían 65 mil 760 afiliados, cuando un año antes eran 65 mil 428 clientes.
Los fondos obtuvieron 3.8% de rentabilidad promedio en los últimos 12 meses.
Unos $425 millones están invertidos en instituciones financieras, lo que equivale al 62% de la totalidad de los fondos.
En esta industria participa Progreso, que forma parte de Global Bank Corporation desde 2014.
Está ProFuturo, que es la primera administradora de fondos de pensiones en Panamá, fundada en 1995 y es subsidiaria 100% de Banco General.
Y por otro lado, está Quantia, una subsidiaria de MMG Bank, que desde 2018 empezó a brindar el producto de fondos de ahorros privados.
Los fondos son administrados aplicando manuales de gobierno corporativo, muy por el contrario a lo que sucede en la CSS, con el fondo de Invalidez, Vejez y Muerte (IVM), el sistema público de pensiones.
En el caso de los cotizantes de la CSS que forman parte del sistema mixto de pensiones, y quienes acumulan ahorros en cuentas individuales, por unos 17 años se ha prometido tener la información de sus ahorros al alcance de un clic, pero esto no se ha cumplido. Se tiene que requerir la información y la entrega puede tardar días.
Ya se estrenó el año 2022, y la CSS solo maneja de forma oficial los resultados del IVM al cierre de 2019, aunque la junta directiva tiene en su poder el resumen de los resultados financieros preliminares de 2020, los cuales revelan un déficit de caja de más de $500 millones en el subsistema exclusivamente de beneficio definido de IVM.
La merma en los ingresos y el alza de los gastos es lo que provoca este déficit, que en los últimos años ha sido tapado con las reservas. Esto pone en aprietos a la entidad para el pago de las pensiones.