Solucionar las fallas que provocaron que la agencia calificadora Fitch rebajara en febrero pasado la nota del país debe ser la meta del Gobierno para el 2021 y así evitar perder el grado del inversión.
Este fue el mensaje central de la exposición que hizo el exsuperintendente de Bancos de Panamá, Alberto Diamond, ante el Consejo Interamericano de Comercio y Producción (CICyP).
Diamond indicó que la rebaja en la calificación que sufrieron 5 bancos de la plaza producto de la disminución de la nota soberana del país, no es un reflejo de la situación del sector bancario panameño, que en su opinión, ha tomado las medidas necesarias para mantener la liquidez y niveles de solvencia por encima de lo que establecen las normas locales.
Fitch Ratings rebajó la nota de riesgo de cinco bancos panameños (Banco Nacional, Banco General, Credicorp Bank, Global Bank y MMG Bank), tres de ellos perdieron su grado de inversión.
Diamond no descarta que a raíz de esta observación se produzca un incremento en las tasas de financiamiento, pero reitera que más allá de la rebaja en la calificación de los bancos, es importante tomar acciones que lleven al país a no perder el grado de inversión, lo que provocaría una ola de efectos negativos sobre la economía.
La intervención de Diamond estuvo presidida por las palabras del exministro de Comercio e Industrias, Roberto Alfaro, quien señaló que el Gobierno no puede continuar con la misma política del año pasado, cuando se incrementó la deuda, el gasto no se redujo y la inversión fue prácticamente nula.
“El Gobierno solo está atendiendo la crisis sanitaria y está cubriendo su gasto corriente con deuda y eso no es saludable”, comentó.
El año pasado el producto interno bruto cayó 17.9%, siendo una de las caídas más prolongadas provocada por el confinamiento y restricciones que aplicó el Gobierno para frenar la pandemia respiratoria.
Adicional del incremento de la deuda y el aumento del gasto, Alfaro señala que la calificadoras están prestando atención a la inseguridad jurídica producto del incumplimiento de las leyes, la precaria situación de las finanzas de los programas de la Caja del Seguro Social, el aumento del desempleo, cierre de comercios, entre otros.
