El Ministerio de Salud (Minsa) y la Caja de Seguro Social (CSS) han hecho una invitación conjunta a las empresas interesadas en cotizar el mobiliario e infraestructura temporal que se utilizará en la habilitación provisional del centro de convenciones de Amador, para la atención de los pacientes infectados con la Covid-19.
El proceso de contratación que finalmente se pacte ha sido convocado a través de la llamada mesa de compras conjuntas y se hará bajo procedimiento excepcional, amparado en el estado de emergencia decretado por el Ejecutivo desde el pasado 13 de marzo.
Para seleccionar la cotización que satisfaga las necesidades del Estado, la mesa tomará en consideración los precios cotizados, el plazo de entrega de la obra (habilitación), así como el cumplimiento de los requisitos listados en los términos de referencia.
En los documentos colgados en el portal de PanamaCompra no se pudo identificar un precio de referencia.
Por otro lado, se aclara que la invitación a “cotizar” no es un procedimiento de selección de contratista o acto público propiamente. “El fundamento legal de esta invitación se encuentra contenido en lo dispuesto en el artículo 79 Texto Único de la Ley No.22 de 27 de junio de 2006, ordenado por la Ley No.61 de 27 de septiembre de 2017, que establece el Procedimiento especial de adquisiciones de emergencia”, indica el documento.
Además, advierten de que no caben acciones de reclamo, puesto que no se trata de un acto público de selección de contratista, sino de una solicitud para presentar cotizaciones; aunque se sabe que luego de presentar cotizaciones se firmará un contrato.
Las cotizaciones deberán presentarse el 4 de septiembre de 2020, de 9:00 a.m. a 11:00 a.m. Antes, el lunes 31 de agosto, los interesados podrán hacer la única visita de campo programada en Amador.
Las referencias del Minsa y la CSS suponen un trabajo grande de adecuación de la infraestructura y también de compra de mobiliario. El lugar contará con 784 camas, distribuidas en tres salas de hospitalización, en las que se necesitarán paredes temporales de gypsum, tomas de agua y de energía.
El proyecto utilizará dentro de las instalaciones del centro de convenciones un área total de 18,048 metros cuadrados de construcción cerrada, en donde se ubicarán las salas de hospitalización, áreas de ducha para pacientes y personal médico, cuartos de insumos y áreas de descanso, además de cafetería, cuartos de enfermería y vestidores.
También se ha contemplado la construcción de rampas para el traslado o movimiento de pacientes y la llegada de las ambulancias.
El Estado decidió unificar en una misma cotización los trabajos de infraestructura con la dotación de mobiliario, entre los que destacan sillas, escritorios, mesas de cocina, archivadores, sistema de señalización, servicio de agua potable y carpintería.
Cuando Panamá registró los primeros casos de la Covid-19, en marzo pasado, la empresa China Construction America (CCA), a cargo de la construcción del Centro de Convenciones de Amador, ofreció al Gobierno la adecuación de esta infraestructura para convertirla en un hospital temporal de más de mil 500 camas para pacientes no graves de Covid-19. El Gobierno rechazó la donación de CCA.
En su momento, el ministro de Obras Públicas, Rafael Sabonge, justificó la acción al aducir que el consorcio evaluaría hacer las divisiones internas que se necesitaban, pero que había que pagar por el equipamiento.
En este llamado a cotizar el mobiliario e infraestructura, el Gobierno tendría que hacerse cargo de ambas cosas.
Los trabajos en el centro de convenciones de Amador se sumarían a las adecuaciones realizadas en el centro de convenciones Figali, también en la misma zona, que aportaron 160 camas para personas con el nuevo coronavirus, por un costo cercano a los 700 mil dólares.