A pesar de que Panamá al igual que casi todo el planeta se encuentra en estado de emergencia por el nuevo coronavirus, los delitos siguen estando en escena, particularmente las estafas. Por estos días cuando la mayoría de la población cumple restricciones de movilidad para evitar la propagación del Covid-19, los estafadores usan la tecnología para alcanzar sus objetivos.
Las estafas se dan a través del envío de mensajes de voz, correos electrónicos o textos.
Los casos
Azael Saavedra, fiscal de Atención Primaria del Ministerio Público, dio cuenta de algunas de las modalidades que se han dado en los últimos días. Los estafadores buscan tiendas en línea o redes sociales que ofrecen artículos de aseo e higiene para la prevención del Covid-19. Se muestran interesados en comprar los productos, y luego hacen un supuesto pago que se refleja en la cuenta bancaria del vendedor. Tiempo después el vendedor recibe la información de que el dinero no existe. Pero, la mercancía ya ha sido entregada al estafador.
El fiscal Saavedra argumentó que aunque la recepción de casos por estafas disminuyó en comparación con otros meses, las que se han dado, “están íntimamente relacionadas con la pandemia”.
Narró que también tienen denuncias relacionadas con personas (el estafador) que se hacen pasar por un funcionario de alto rango de alguna entidad del Estado y a través de internet piden donaciones.
“Hay que tener mucho cuidado. Si alguna entidad como el Ministerio de Salud, seguramente será una persona que está debidamente identificada y autorizada. Nos toca a nosotros los ciudadanos estar atentos y anuentes de que hay personas que están dedicándose a esto aún en estas circunstancias”, manifestó.
Las entidades bancarias alertan a sus clientes. Recomiendan proteger su dinero y su identidad; no compartir información personal como el número de su cuenta de banco, ni el de su tarjeta de crédito en sitios desconocidos.
Se sabe que el confinamiento ha disparado las compras en línea y los pedidos a domicilio. Los operadores de internet reportan un aumento de hasta el 50% en el uso de la red, por lo que a los consumidores les toca moverse sin miedo, pero con precaución.
Así como la epidemia
Las estafas en tiempos del virus no son un tema exclusivo de Panamá. El pasado 24 de marzo, BBC Mundo reportó que cibercriminales en diversos países están aprovechando la crisis sanitaria global para robar datos y dinero.
De hecho, la Organización Mundial de la Salud (OMS) emitió una advertencia en la que informó que hay criminales que se están haciendo pasar por la OMS para robar información delicada y dinero a ciudadanos.
“Si alguien te contacta, ya sea una persona u organización que parece ser la OMS, verifica su autenticidad antes de responder”, advirtió la organización en un comunicado.
La OMS también dio a conocer que por estos días están apareciendo correos electrónicos maliciosos que aparentan ser de la organización. En esos correos se pide a la gente que de información de carácter importante: nombres de usuario o contraseñas de datas específicas. También les invitan a que hagan clic en un enlace o documento adjunto malicioso. Son técnicas que usan los cibercriminales para robar información delicada.
Interpol alerta
Mientras que la Organización Internacional de la Policía Criminal (Interpol) también ha advertido sobre el fenómeno. En medio de la emergencia, delincuentes aprovechan para robar datos personales a sus víctimas. A través de un comunicado hecho público en su cuenta de Twitter, Interpol dio a conocer que tiendas y sitios web falsos ofrecen todo tipo de suministros médicos, pero en realidad se trata de un engaño.
“Los delincuentes están explotando el miedo y la incertidumbre creados por Covid-19 para aprovecharse de ciudadanos inocentes que solo buscan proteger su salud y la de sus seres queridos”, aseguró Jürgen Stock, secretario general de Interpol en el comunicado.
Stock manifestó que cualquier persona que esté pensando comprar suministros médicos en línea debe tomarse un momento para verificar que está tratando con una empresa legítima y de buena reputación, de lo contrario su dinero podría perderse “por delincuentes sin escrúpulos”.
