Las remesas mexicanas superaron las expectativas de economistas por sexto mes consecutivo, proporcionando el apoyo que tanto necesitan las familias de bajos ingresos a medida que la economía colapsa y el desempleo aumenta.
Trabajadores mexicanos en el exterior enviaron a casa $3,530 millones en julio, es decir 7.2% más que hace un año y muy por encima de la estimación promedio de analistas de $3,340 millones en una encuesta de Bloomberg.
Las remesas más altas de lo esperado son una buena noticia para la segunda economía más grande de América Latina, que se encamina hacia su recesión más profunda en 2020 en casi un siglo. El presidente, Andrés Manuel López Obrador, pronostica que México recibirá un récord de $40,000 millones de sus trabajadores fuera del país después de un alza anual de 10% en las remesas entre enero y julio.