Esta semana recibí la gentil invitación de Patricia Planells, para compartir algunas reflexiones sobre la importancia de la marca personal, en el marco del Executive Forums.
Para iniciar la reflexión es importante establecer que hoy en día una marca es “la promesa de una experiencia” y esta definición aplica perfectamente para la construcción de marca personal.
Desde mi perspectiva, hay algunos criterios fundamentales para construir una marca personal:
1.- Vive tu propósito y conéctalo con la gente. No es posible construir una marca personal fuerte y sostenible en el tiempo si no estableces claramente quién eres y cuál es tu aporte a la sociedad o tu entorno de influencia. Hay que ser útil para ser reconocido y respetado.
2.- Identifica el espíritu del tiempo. El esfuerzo para influir y ser relevante tiene que ver con la narrativa que desarrollas y su conexión con las realidades de la sociedad. Establecer cuál es el enfoque temático y la agenda para posicionar ideas poderosas constituye un factor crítico para lograr tus objetivos de marca personal.
3.- Confía en ti mismo y desarrolla tus competencias medulares. Este aspecto implica concentrar los esfuerzos de construcción de marca personal en aquello en lo que eres bueno, potenciar tus capacidades para lograr una clara diferenciación y confiar en el potencial del talento y conocimiento que pretendes compartir.
4.- Crea experiencias memorables. La forma como te conectas con las personas, a través de las redes sociales, cara a cara, en charlas, presentaciones, en tu trabajo o entre tus amigos es un catalizador de tu marca personal.
5.- Cuida tu reputación. Las personas como las empresas tienen un activo muy volátil, difícil de desarrollar pero muy fácil de perder: la reputación. Valora tu reputación como un activo y protégela a través de un buen comportamiento, tomando las decisiones correctas, valorando los errores como oportunidades de aprendizaje y creando valor en tus puntos de contacto.
6.- Comunica. El despliegue de tus ideas es fundamental. Una buena idea o mensaje no comunicado solo existe para ti. Comunicar implica tener ideas claras y útiles, canales correctos para transmitirlas y mantener un diálogo con tus interlocutores. En la práctica se trata de aprovechar estratégicamente el poder de las redes sociales, generar contenidos valiosos, capitalizar oportunidades de proyección en los escenarios de tu área de especialización y ser consistente en el despliegue de tu estrategia.
El autor es consultor en comunicaciones estratégicas.
