La ambición de Estados Unidos (EU) y Europa de impulsar la producción de materias primas raras utilizadas en vehículos eléctricos y turbinas eólicas y reducir la dependencia de China enfrentará obstáculos, incluidos costos más altos y preocupaciones ambientales.
Esta semana, dos congresistas estadounidenses presentaron legislación bipartidista destinada a reducir la dependencia de China para las tierras raras, similar a la que el senador Ted Cruz introdujo en mayo. La Unión Europea intensificó un impulso para depender menos de las materias primas importadas, con la promesa de la Comisión Europea de crear una alianza de materias primas para fin de año debido a su importancia en industrias en crecimiento.
La preocupación por la enorme influencia de China ganó más prominencia a medida que aumentaban las tensiones comerciales entre EU y China. El costo, el acceso a las materias primas y las preocupaciones ambientales pueden ser los mayores obstáculos para crear una cadena de suministro independiente, según analistas. “Es muy difícil de mantener, es caro de mantener”, asegura Jennifer Bisceglie, directora de Interos, una empresa de gestión de riesgos de la cadena de suministro. “Si crea una cadena de suministro local completa, piense en el gasto en capacitar mano de obra y obtener las materias primas...”, añadió.