La empresa brasileña Odebrecht (CNO) calificó de “detalles mínimos” los trabajos que no logró completar antes del vencimiento de la octava adenda del contrato para la construcción de la nueva terminal de pasajeros en el Aeropuerto Internacional de Tocumen que venció el pasado 30 de septiembre.
La empresa presentó ayer un recurso de apelación ante el Tribunal Administrativo de Contrataciones Públicas en el que pidió que se suspenda la resolución administrativa del contrato que emitió Tocumen el 28 de septiembre.
En sus alegatos, Odebrecht indica que Tocumen incumplió con sus pagos, lo que impidió que terminara con los trabajos acordados en la octava adenda.
La empresa alega también que debido a la pandemia respiratoria del coronavirus (Covid-19), registró retrasos en la entrega de suministros.
En este punto, Enrique Villegas, vicepresidente de proyectos de Tocumen, S.A., indicó que la empresa recibió en los últimos meses más de 10 millones de dólares por avance de obras.
En cuanto al supuesto retraso en los pagos, la administración de Tocumen indica que ya cancelaron 910 millones de los 917 millones de dólares que es el monto final del proyecto, quedando por transferir 7 millones de dólares, que -de acuerdo con Villegas- corresponden mayormente a fondos retenidos, como lo establece el contrato y la Ley 22 de 2006.
En cuanto a la inhabilitación por 3 años que ordenó Tocumen contra Odebrecht al incumplir los términos de la adenda 8, la empresa brasileña confesa del pago de sobornos en una docena de países, incluyendo Panamá, asegura que Tocumen perdió ese derecho al recibir en febrero de 2020 el proyecto, quedando por atender “items menores”. En una inspección realizada el 1 de octubre, Tocumen, junto con la Contraloría General y un notario, certificó que Odebrecht no atendió 400 trabajos, la mayoría relacionados con el sistema de enfriamiento, sistemas contra incendios, informáticos y de programación, entre otros.