La Organización Mundial del Comercio (OMC) creó un panel que dirimirá en el conflicto comercial entre Panamá y Costa Rica. Así lo acordó el Órgano de Solución de Diferencias del organismo internacional, con sede en Ginebra, Suiza.
Costa Rica remitió una solicitud para que un panel de la OMC se pronuncie sobre medidas impuestas por Panamá que limitan o prohíben importaciones costarricenses de productos lácteos, cárnicos, alimentos para peces, fresas, piña, plátanos y bananas.
El país vecino arguye que las decisiones de Panamá que han limitado las importaciones no tienen base científica y que no habría justificación para no renovar la autorización de las importaciones.
El presidente de la Asociación Panameña de Exportadores (Apex), Roberto Tribaldos, comentó ayer a este diario que el gremio aboga por una solución conciliada, pero también dejó claro que “si alguien ha tratado de solucionar estas diferencias ha sido Panamá”.
El conflicto se centra en la aplicación de las llamadas medidas no arancelarias que suponen una limitación para el intercambio comercial entre los dos países.
Tribaldos expuso que en la última década, el Servicio Nacional de Salud Animal (Senasa) de Costa Rica ha negado consistentemente las aprobaciones de las plantas panameñas, una autorización necesaria para poder enviar productos al país vecino.
Las trabas se presentan, por ejemplo, en forma de largos cuestionarios para poder renovar las autorizaciones. Esto sucedía en un escenario anterior a la pandemia, por lo que las autoridades costarricenses podrían haber enviado inspectores para verificar el funcionamiento de las plantas nacionales, algunas de las cuales trabajan con franquicias internacionales que tienen exigentes estándares.
Las cifras reflejan que la balanza comercial está inclinada a favor del país vecino. Según cálculos de la Oficina de Inteligencia Comercial (Intelcom) con base en datos del Instituto Nacional de Estadística y Censo, en 2020 Panamá exportó a Costa Rica $38 millones, mientras que importó más de $360 millones.
A pesar de que ha habido reuniones y negociaciones en los últimos años, la situación no ha avanzado. Tribaldos dijo que espera que estas situaciones se puedan solucionar de una manera consensuada entre las partes, “pero desde el punto de vista de la Apex no vemos buena voluntad por parte de Costa Rica en la aplicación equitativa de las normas”, sostuvo.
La Prensa contactó ayer al Ministerio de Comercio e Industrias para conocer su posición sobre el conflicto, pero al cierre de esta edición no se había recibido respuesta.