Ramón Martínez, ministro de Comercio e Industrias (MICI), anticipa, con cierto optimismo, que en dos semanas, contadas a partir de ayer 12 de mayo, podría darse la reapertura del segundo bloque de actividades comerciales suspendidas a raíz del nuevo virus respiratorio que produce la Covid-19.
Este bloque, bajo el esquema incluye a la construcción de infraestructura pública, minería no metálica e industria, además de lugares de culto, parques, áreas deportivas y áreas sociales, con 25% de capacidad y distanciamiento físico de 2 metros.
El anuncio sirve como punta de lanza para que sectores bien limitados inicien un proceso de adecuación y la estructuración de los comité de salud que ha pedido el Estado, aunque persiste la incertidumbre ante el hecho de que para la mayoría de las actividades no hay una fecha tentativa de reapertura.
La hoja de ruta para la reactivación económica se elaboró con insumos “muy estructurados” del INCAE, de la consultora McKinsey y los asesores de salud, dijo.
“Este plan está basado en el índice de contagio de las personas y el impacto económico de ello”, detalló Martínez.
El Gobierno programa evaluar la situación de contagio por semana y así definir el calendario de apertura. “No quisimos poner fecha porque se podría causar una expectativa que después habría que cambiar”, añadió el ministro de Comercio.
Igualmente indicó que las empresas y comercios que están incluidas en el bloque 1 deberán contar con el comité de salud para retornar sus actividades desde hoy.
“El 13 de mayo marca el inicio de reapertura, pero las empresas del bloque 1 que no estén preparadas, deben hacer los ajuste y cumplir con los parámetros establecidos por el Minsa. Tenemos que adaptarnos a la nueva normalidad”, dijo Martínez.
El funcionario indicó que a partir de hoy podrán operar consultorios médicos, servicios de odontología, talleres de mecánica, electricistas, plomeros, jardineros, venta al por menor en línea, mantenimiento de piscinas, reparación de acondicionadores de aire y ascensores, algo que no se había detallado antes.
Las empresas deberán contar con el comité especial de salud e higiene, conformado con dos y hasta seis personas de una entidad o empresa.
A estas empresas, una vez realicen la apertura se les estará haciendo verificaciones y deberán contar con un certificado. Los plomeros o electricistas que realizan trabajos de forma independiente deberán formalizar sus servicios y solicitar su salvoconducto a través de las plataformas del MICI.
Aldo Mangravita, presidente del Sindicato de Industriales de Panamá (SIP), considera “incierto” el regreso a la normalidad ante la falta de información oficial detallada de cuáles son las actividades que podrán iniciar operaciones.
El anuncio de reapertura del primer bloque se hizo con apenas un día de por medio, lo que pone en aprietos a muchas empresas.
Por otro lado, Mangravita cuestionó la priorización que se le da a unos sectores sobre otros. A su juicio, no existe diferencia entre una ferretería, que en estos momentos solo tiene ventas online, con un supermercado o farmacia.
Mangravita pidió que se flexibilicen las restricciones de movilización. El MICI adelantó que entre el bloque 2 y 3 se podría anunciar cambios en la movilidad por género y número de cédula.
