México podría utilizar una transferencia multimillonaria del Fondo Monetario Internacional para pagar deuda por adelantado, según las consideraciones del presidente del país, pero el Gobierno necesitaría comprar los fondos al banco central, dijo el gobernador de Banxico, Alejandro Díaz de León.
La transferencia de las reservas aprobadas recientemente del FMI al banco central por un valor aproximado de 12 mil millones de dólares, no es una “donación”, dijo Díaz de León.
Emitió los comentarios después de que el presidente, Andrés Manuel López Obrador, dijera esta semana que estaba considerando usar la parte de México de los ingresos inesperados para pagar por adelantado las deudas del país.
“Son un activo que se contabiliza como reserva internacional”, dijo por teléfono Díaz de León. “Toda moneda extranjera que el Gobierno federal puede obtener del banco central se compra”, dijo, y agregó que cualquier transacción eventual debe realizarse a precios de mercado.
Los comentarios de López Obrador llevaron a especulaciones sobre si está considerando simplemente tomar los fondos o si está buscando comprarlos a Banxico, como se conoce al banco central.
Los países miembros del FMI aprobaron la mayor inyección de recursos en la historia de la organización, de $650 mil millones en activos de reserva, conocidos como derechos especiales de giro, destinados a ayudar a los países a lidiar con la creciente deuda y las consecuencias de la pandemia de la Covid-19.
Si bien la mayoría de los economistas están de acuerdo en que México tendría que vender bonos o usar pesos de la Tesorería para comprar las reservas del FMI, Marco Oviedo, execonomista jefe para América Latina de Barclays Plc, dijo que el FMI podría acordar transferir los fondos directamente a la Secretaría de Hacienda.
Dijo que la Comisión de Cambios de divisas, compuesta por altos funcionarios de la secretaría y de Banxico, también podría otorgarle al Gobierno permiso para usar las reservas para pagar deuda.
Oviedo señaló que cuando fue funcionario del área de deuda pública en la Secretaría de Hacienda de 2008 a 2011, México consideró la posibilidad en ese momento para ayudar a pagar la deuda interna durante la crisis económica mundial, pero decidió no hacerlo después de que mejorara la liquidez del mercado.
Díaz de León declinó a realizar comentarios sobre si México se ha puesto en contacto con Banxico para comprar las reservas del FMI, diciendo que el banco central no puede discutir nada de lo que hace en nombre del Gobierno federal.
Tampoco quiso realizar comentarios sobre si la comisión cambiaria puede otorgar reservas a México para pagar deuda.
Durante la entrevista, Díaz de León dijo que los derechos especiales de giro se contabilizan como un activo y como un pasivo o crédito en los balances del banco central.
“Esto no es una contribución”, dijo. “La única intención del FMI de hacer esto es aumentar la disponibilidad de reservas internacionales para sus miembros”.