La industria azucarera de Brasil está reviviendo. El principal productor del país planea comprar dos plantas en lo que sería el mayor acuerdo del sector en siete años.
Raizen Energía, S.A., una sociedad entre Cosan, S.A. y Royal Dutch Shell Plc, hizo una oferta vinculante de $250 millones para adquirir 2 unidades de moledura de Tonon Bioenergía, S.A. en una subasta de una corte de bancarrotas, su primer gran paso para aumentar capacidad desde su fundación en 2010.
El acuerdo, que aún debe ser aprobado por los acreedores de Tonon, aumentaría la capacidad de moledura de caña de azúcar de Raizen en 6 millones de toneladas al año o 10%.
El acuerdo podría ser una señal de que la industria azucarera de Brasil está lista para consolidarse en un momento en que varias compañías en bancarrota están disponibles para la venta.
Cerca de 50 fábricas de azúcar y etanol han cerrado en el país y 70 se han declarado en quiebra desde 2011 conforme un bajón del edulcorante redujo las ganancias de las empresas y provocó incumplimientos de deuda, según el grupo industrial Única.