La transformación digital de los bancos en particular, y de los negocios en general, es un proceso que llegó para quedarse.
“Los negocios tienen que transformarse de acuerdo a cambios tecnológicos, regulatorios, de las necesidades de los clientes y del entorno competitivo”, dijo ayer Christopher Mager, director general de Innovación Global del banco estadounidense BNY Mellon, durante la Conferencia Regional Latinoamericana que organiza la compañía Switf.
Las empresas que no se sumen a la transformación corren el riesgo de quedar rezagadas en el mercado. “Si no cambias con los tiempos y te transformas, eventualmente corres el riesgo de ser desintermediado. Los clientes dejarán de necesitarte y se irán a competidores que resuelvan sus necesidades de manera más apropiada”.
Por su parte, Carlos Troetsch, presidente de la Federación Latinoamericana de Bancos, dijo que el reto de los banqueros es no quedar rezagados en esta tendencia de transformación.
En Panamá, una de las quejas de los usuarios es la gran cantidad de requisitos para abrir una cuenta. Con el objetivo de reducir la burocracia, la industria está planeando la creación de una base de datos que recopile y mantenga la información de los clientes y que sirva para que los bancos tengan acceso a una información que les facilite el proceso de apertura de cuentas, dijo Troetsch.