La información la brindó Edwin Wald, hermano de la desaparecida y presidente de la Asociación de Familiares de Desaparecidos de Panamá, quien calificó de inaceptable que a 13 años de derrocada la dictadura militar que gobernó Panamá entre 1968 y 1989, se continúe jugando con la justicia.
Ese juego, añadió, ha llegado al punto de convertir la justicia en Panamá en un instrumento de la corrupción y la impunidad. El jueves pasado, 27 de marzo, se cumplieron 26 años de la desaparición de la dirigente estudiantil Rita Wald.
Su lucha, añadió, se enmarcará ahora en el plano internacional, con la esperanza puesta en que este caso ayude a impulsar a más de un centenar de casos de asesinados y desaparecidos por el régimen dictatorial, que llenó de luto y dolor a muchos hogares panameños y que causó grandes heridas y divisiones que sin justicia no podrán sanar.
A juicio de Wald, cuando las investigaciones llevadas a cabo por la Comisión de la Verdad no condujeron a sancionar a los violadores de los derechos humanos perpetrados en los 21 años de régimen castrense, estas diligencias se convirtieron en otro mecanismo de impunidad.