El presidente Fernando Lugo, quien sigue un tratamiento contra el cáncer linfático, “no tiene inhabilidad, por tanto seguirá gobernando hasta 2013 porque ha superado la trombosis que sufrió el fin de semana pasado”, según anunció Miguel López, jefe del Gabinete.
El mandatario paraguayo, de 59 años, lleva cuatro días ingresado en el Hospital Sirio Libanés de Sao Paulo, Brasil, donde fue tratado de urgencia por una trombosis en la vena cava superior, probablemente producida como efecto colateral de la quimioterapia a la que es sometido para reducir el linfoma del tipo no-Hodgkin.
En agosto, los médicos le detectaron cáncer linfático en la ingle, tórax y tercera vértebra lumbar.
El hematólogo Alfredo Boccia, que acompaña a Lugo en el hospital de Sao Paulo, dijo el martes que “el presidente no está curado de cáncer, sólo que el linfoma desapareció con las tres primeras sesiones de quimioterapia, de las seis programadas hasta diciembre”.
