Un estadounidense de 13 años que realizó una rara visita a Pyongyang dijo que las autoridades comunistas recibieron con agrado su idea de crear un “bosque infantil de la paz” en la zona desmilitarizada que divide ambas Coreas, aunque aclararon que sólo sería posible si ambos países firman un tratado de paz. Jonathan Lee regresó el jueves tras realizar una visita de ocho días al aislado país, durante la cual recorrió la zona desmilitarizada.
Una esperada reunión con el líder norcoreano Kim Jong Il no se produjo al final, aunque Lee dijo que las autoridades le entregaron una carta del mandatario.
“En este viaje descubrí que ambas partes desean la reunificación y que Corea es una, así que veo la esperanza en la península coreana”, dijo Lee. El joven realizó la visita con sus padres, Kyoung y Melissa Lee.
La empobrecida Corea del Norte es uno de los países más aislados del mundo y su gobierno de estilo estalinista está sometido a las sanciones que le impuso la ONU por lanzar misiles y negarse a aceptar las inspecciones de la Agencia Internacional de Energía Atómica.
Desde que concluyó la guerra de Corea (1950-1953) con una tregua y no un armisticio, EU, Corea del Sur y Corea del Norte siguen técnicamente en guerra.
Los cuatro kilómetros de la zona desmilitarizada son la frontera más vigilada del mundo, clausurada con vallas electrificadas y repleta de minas, torres de vigilancia y bases militares.

